viernes, 21 de agosto de 2009

!Qué calor!


En la panadería, en la farmacia, en el ascensor, en las fiestas del pueblo, en la oficina, en el funeral de la madre de Fernándo, en el supermercado, en el banco, al teléfono, en incluso en el baño no pasa un día que un buen número de sufridores, entre los que me apunto yo, me pregunten si estoy de vacaciones o si por el contrario he vuelto, aunque estos son los menos, es fácil adivinar a través de la tonalidad poco veraniega que exhibe mi piel, vamos muy similar a la que luzco en el mes de febrero después de haber pasado el proceso vírico de anginas como es de rigor, que mis vacaciones este año se han esfumado, suspendido o cancelado. Vaya por delante que mi sufrimiento, especialmente este año, es mínimo y eso que con otra será la segunda vez que acudo a la playa de Almuñecar a soportar el bullicio de todos los años y además en esta ocasión añadir la falta de espacios de estacionamiento que nos obliga a estirar las piernas durante largos kilómetros hasta que llegue ese momento en que la C15 (Furgoneta) abandona la plaza de garaje para acudir al Mercadona al objeto de cumplir con las labores de avituallamiento de la semana. Es momento clave y decisivo, ahora o nunca, me coloco en el centro de la calzada, saco brazo y manos por la ventanilla y anuncio a la cola de sufridores que aquel sitio es para mí y que nadie se atreva a ocupar aquel patrimonio avistado desde hace algunas horas. Y es que como están los aparcamientos en Velilla cualquiera pierde la oportunidad. Así las cosas, el verano se va alejando aunque este año consigo no se esté llevando el calor, vaya noches que estamos pasando ni un soplo de aire fresco, a sudar la gota, dios mio me levanto 5 veces me ducho las mismas y al final siempre lo mismo a eso de las 5 de la mañana me quedo vencido, todo ello después de cumplir con tesón y entrega la tabla de ejercicios de relajación que me prescribió mi amigo Carlos Ramiro, eso de pensar que tienes un globo rojo por encima de la apéndice y que soplas una, dos, tres..... y se infla, inflados tengo yo los hue...... de tanto calor. Buenas noticias hoy descienden las temperaturas en el conjunto del territorio y por ende en Granada, que ganas tengo de qué la canícula nos abandone, que se valla el calor y que ya no me pregunten "estás de vacaciones".

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