viernes, 19 de diciembre de 2008

Las comidas de navidad

Hoy he comenzado el día redactando el balance agrario 2008, es decir, el comportamiento que ha tenido el campo y todo lo que está cerca en este año. Me parecia muy cercano el día que nos encerrabamos en el Ayuntamiento de Aldeire reivindicando un precio justo para los terrenos ocupados por la central termosolar y que habian sido arrebatados en contra de su voluntad a una veintena de agricultores, cerca tambien quedaban las numerosas veces que se han repartido hortalizas en Puerta Real, los problemas de los regantes de Hernan Valle con la empresa Hortícolas Conesa, las concentraciones de avicultores a las puertas de los mataderos exigiendo condiciones justas en su relación con las integradoras, las decenas de viajes a los municipios para tratar asuntos enquistados en el pasado que a día de hoy aún están presentes, todo esto es pasado, ocurrido en algo menos de un año y que ha supuesto desgaste, ilusion, impotencia, satisfacción, incomprensión, disputas, felicitaciones, criticas de todo tipo, malentendidos, ultimatum, negociación, concenso, confrontación, aciertos y desatinos. El futuro más inmediato que mañana será presente me deparará un poco más de lo mismo. Así es la vida, de ahí que cada vez tenga más claro que el momento dá sentido a la vida y que el mejor resultado que te proporciana es la amistad, el conocer y el compartir con alguien que te llama para compartir su problema.
Despues de un condensado pleno del Consejo Social de la Universidad de Granada he ido a compartir mesa y mantel con la Fundación Empresa y Juventud filial de Aldeas Infantiles, hoy los protagonistas eran los jovenes y las colaboradores, es decir los pilares de un proyecto de inserción que permite mantener la esperanza y la autoestima a personas con un importante grado de discapacidad. Gracias Jose Ignacio, Pedro y Emilio por dejarme compartir con vosotros unas cuantas horas inolvidables..

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